Siempre se nos impuso desde pequeños la idea del orden como la mejor manera de hacer las cosas sin darnos mayores explicaciones. “Debes ordenar tu cuarto” nos repetían a todos y en la escuela la obsesión por el orden se acentuaba. Solo hasta entrada la vida adulta pudimos comprenderlo todo pues crecimos con un rechazo hacia él, lo aplicamos por cumplir.
Resulta que el mensaje era que el orden está absolutamente ligado a la planeación, de hecho, cohesiona los elementos de un plan, para que salga como lo planeamos. Suena redundante, pero parte importante de organizar es sistematizar a qué atiende cada proceso y saber para qué sirve, a dónde me va a conducir y cumplirlo. En conclusión, tomar una serie de medidas y acciones que me llevarán a alcanzar uno o varios objetivos.
Con el auge de internet vinieron nuevas formas de posicionar una marca en línea a través de plataformas sociales gratuitas. Hoy por hoy, estar en redes es un requisito obligado para darse a conocer y es mucho más económico que los canales tradicionales de publicidad como la televisión o las grandes vallas en autopistas.
Para encaminarse en la promoción en medios digitales es fundamental también la planeación, como en la vida misma. Aunque pareciera que los contenidos que se publican son espontáneos, detrás hay una ciencia emergente que indica que el éxito depende de una buena estrategia de medios digitales.
Así como en la vida es importante saber para dónde vamos para tomar decisiones que nos lleven allí, en las redes la planeación estratégica es vital para que los contenidos publicados se comprometan con un objetivo y las interacciones y métricas generales sean evaluadas, replanteadas si es necesario o validadas en función del posicionamiento de la marca. Es un aprendizaje continuo, una reinvención constante.
Así pues, las estrategias de medios digitales toman prestado del mercadeo y otras ciencias empresariales, cinco directrices que determinan la calidad de una estrategia sólida; Que pueda responder el objetivo que se plantee, que genere una conexión entre el entorno y los recursos empleados para la estrategia, que se genere una ventaja única o distintivo para la marca, que sea dinámica y adaptable a diversos cambios o crisis y que sea medible en términos de efectividad.
Una de las grandes ventajas de posicionar marca digital, es que se puede ver en tiempo real el alcance de nuestros mensajes, piezas gráficas, vídeos y llegar a cifras antes inimaginables por las barreras tecnológicas y la globalización, por lo que solo a través de una estrategia sólida de medios digitales es posible aprovechar estos elementos para enriquecer la comunicación y generar “engagement” y el alcance duradero entre los públicos objetivo.
Todo proceso en la vida, desde lo cotidiano hasta lo empresarial, requieren planificación y disciplina, ello no hace menos creativos los mensajes ni coarta la creatividad, por el contrario, ofrece un norte con muchas posibilidades de mejora.